PAMPLONA, 31 de octubre.

La Policía Municipal de Pamplona ha llevado a cabo la detención de un individuo y está investigando a otros dos por su supuesta participación en una serie de hurtos realizados bajo el engañoso método afectuoso conocido como "hurto por abrazo".

Los robos, que involucraron la sustracción de dos relojes y una cadena de oro, se llevaron a cabo en diferentes fechas: uno en julio, otro en agosto y el último en octubre, en distintas localizaciones de la ciudad, como la calle Ochagavía, la avenida de Carlos III y la calle Serafín Olave. Las características del vehículo y las descripciones proporcionadas por las víctimas coinciden con la información recabada por las autoridades, según lo informado por la Policía Municipal.

El pasado viernes, alrededor de las 5:40 de la tarde, un agente de paisano identificó un coche con un hombre al volante y dos mujeres en el interior, el cual se correspondía con el modelo vinculado a varios de estos delitos. Tras seguir el automóvil, el oficial advirtió que el conductor había ignorado hasta cuatro semáforos en rojo, lo que llevó a la intervención policial y al traslado del individuo a dependencias policiales por un posible delito contra la seguridad vial.

Las comprobaciones realizadas por los agentes revelaron que el conductor estaba presuntamente involucrado en un robo violento de un reloj Rolex valorado en aproximadamente 17,000 euros, sucedido en la calle Ochagavía el 23 de julio de 2025. Al parecer, este hombre había sido el encargado de conducir el vehículo del que se había escapado la autora material del robo en ese momento. Para llevar a cabo su arresto, se requirió el apoyo de la Policía Nacional, dado que el sospechoso ya había abandonado el área de Pamplona.

Tras una exhaustiva investigación, el equipo de la Policía ha determinado que la descripción física de una de las mujeres que viajaban en el vehículo este viernes se correlaciona con una de las implicadas en el robo en la calle Ochagavía.

Adicionalmente, se conoció que existen otras dos investigaciones en curso vinculadas a esta misma modalidad delictiva. La primera se refiere a un robo reportado el 11 de agosto de 2025 en la avenida de Carlos III, donde una anciana denunció la sustracción de su reloj. La segunda, ocurrida el 20 de octubre de 2025 en la calle Serafín Olave, fue registrada por una nonagenaria que reportó el hurto de una cadena de oro con un crucifijo.

La Policía Municipal sostiene que las personas investigadas parecen operar como un grupo delictivo cohesionado y bien organizado. A pesar de que intentan despistar cambiando de vehículos, las grabaciones de las cámaras de seguridad han sido fundamentales para establecer su conexión con los delitos reportados.

El modus operandi de estos delincuentes implica buscar a personas de avanzada edad, a quienes seducen mediante palabras amables y abrazos, con el fin de ganar su confianza antes de realizar el robo de sus pertenencias más valiosas.

Para facilitar su escape, los delincuentes siempre cuentan con un vehículo que permanece en las cercanías del lugar donde cometen los hurtos, permitiendo así una rápida fuga tras el delito. Es común en este tipo de infracciones que los delincuentes varíen constantemente sus vehículos y los registren a nombre de terceros, con el objetivo de eludir la identificación y evitar ser vinculados a sus crímenes.

Finalmente, después de ser llevado ante la justicia, el detenido fue puesto en libertad.