En Pamplona, el 14 de noviembre, se llevó a cabo un intenso Debate sobre el Estado de la Comunidad en el Parlamento de Navarra. En este contexto, Laura Aznal, portavoz de EH Bildu, presentó su visión sobre el estado actual de la región, destacando que, si bien ha habido avances significativos en áreas sociales, económicas y democráticas, aún queda mucho trabajo por realizar. Aznal sugirió que se requiere una mayor ambición por parte del Gobierno para lograr un progreso real.

Aznal enfatizó la necesidad de no caer en la inercia, afirmando que “necesitamos una energía activa y propulsora” y que es imperativo “pisar el acelerador” para poder enfrentar adecuadamente los numerosos retos que se presentan ante la comunidad. Esta declaración pone de relieve su apremiante postura sobre la urgencia de la acción gubernamental.

La representante de EH Bildu también alabó el papel crucial de su formación política, asegurando que ha sido determinante para relegar a la derecha y sus políticas al olvido, favoreciendo a las mayorías populares y a la clase trabajadora de Navarra. Hizo alusión a su reciente firma de un acuerdo presupuestario para 2025, señalando que han conseguido mantener diez años consecutivos de presupuestos sin la influencia de la derecha, lo que considera un triunfo para la gente.

Aznal dejó claro que EH Bildu tiene una visión nítida del camino a seguir, proponiendo políticas públicas que aspiren a cambios profundos, que estén conectadas con el territorio y que tengan una perspectiva estratégica. Esta declaración sugiere un enfoque ambicioso para abordar los problemas que enfrenta la comunidad.

En un tema relevante, abogó por una gobernanza feminista, argumentando que la actual realidad responde a un sistema patriarcal que debe ser desafiado mediante políticas valientes y transversales. Aznal insistió en que todos los departamentos deben colaborar para implementar medidas que avancen en políticas feministas, adoptando una perspectiva interseccional.

Aznal abordó preocupaciones sobre la igualdad salarial y las cargas de trabajo que afectan desproporcionadamente a las mujeres, advirtiendo que muchas empresas en Navarra carecen de un plan de igualdad. También citó el aumento de la violencia contra las mujeres y la creciente brecha de género ideológica, subrayando que estos problemas son inaceptables y requieren atención inmediata.

En el ámbito de la fiscalidad, Aznal reflexionó sobre las reformas implementadas desde 2015, señalando que si bien estas han permitido tener presupuestos más expansivos, Navarra aún está lejos de la presión fiscal observada en otros países europeos más avanzados en términos sociales. Criticó que el sistema fiscal actual penaliza principalmente a las rentas del trabajo, mientras que las rentas del capital gozan de un trato favorable, lo que considera injusto.

Además, lamentó que en el presente año no se hayan aprobado medidas que promuevan una fiscalidad progresiva en la que quienes más tienen contribuyan más, argumentando que esto es esencial para redistribuir la riqueza y establecer las bases de una sociedad más justa.

En cuanto al sistema de salud pública, Aznal destacó que actualmente no se está atendiendo adecuadamente a las necesidades de la ciudadanía, mencionando problemas como el difícil acceso a la atención primaria, las listas de espera y la falta de especialistas. Propuso que se necesitan medidas estructurales, enfatizando que el borrador de ley foral que se presenta no cumple con sus expectativas.

Rechazó cualquier posibilidad de privatización del sistema sanitario público, subrayando que la ley debe ser discutida y consensuada, ya que tendrá un impacto significativo en la sanidad en Navarra durante las próximas décadas.

Laura Aznal también se pronunció sobre la crisis de acceso a la vivienda, afirmando que es un derecho básico que no debería estar sujeto a la especulación del mercado. Llamó a una intervención en el mercado inmobiliario para proteger los intereses generales de la población, advirtiendo que dejarlo al libre albedrío beneficiaría únicamente a los poderosos.

En el contexto del euskera, Aznal expresó que los derechos lingüísticos no deberían ser objeto de zonificación y criticó la falta de avances en Navarra en este ámbito, haciendo mención del recién aprobado decreto de méritos.

Finalmente, Aznal argumentó que Navarra “necesita soberanía” para poder afrontar los retos en áreas como salud, educación, vivienda digna y cuidados. Esta soberanía sería clave para avanzar en los derechos locales y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos navarros.

Con respecto a la reciente ponencia parlamentaria sobre la Lorafna, Aznal la consideró una oportunidad invaluable para discutir el autogobierno. Manifestó su esperanza de que este debate permita a Navarra orientarse hacia el futuro que los ciudadanos deseen, argumentando que más autogobierno significa más bienestar y democracia.

En conclusión, Laura Aznal subrayó que un futuro prometedor se cimenta en la instauración de acuerdos entre diversos sectores, garantizando y expandiendo los derechos para todos. Insistió en que en EH Bildu sus prioridades son claras: centrarse en la gente y el bienestar de su pueblo, un compromiso que aseguran seguirán cumpliendo en el futuro.