Crónica Navarra.

Crónica Navarra.

El Ayuntamiento de Pamplona frena la tala de 174 árboles en la Universidad de Navarra.

El Ayuntamiento de Pamplona frena la tala de 174 árboles en la Universidad de Navarra.

PAMPLONA, 18 de agosto. El Ayuntamiento pamplonés ha llevado a cabo una medida contundente al ordenar la paralización inmediata de las obras de tala que afectaban a 174 árboles en las cercanías del campus de la Universidad de Navarra y a lo largo de la orilla del río Sadar. Esta decisión, respaldada por un informe elaborado por el departamento de Conservación Urbana y Sanidad, fue aprobada por la Junta de Gobierno, y responde a la falta de los permisos municipales requeridos para proceder con dichos trabajos.

El área de Urbanismo ha iniciado un expediente de información para esclarecer las circunstancias que rodean esta situación, evaluar la necesidad de los apeos y asumir las responsabilidades que puedan surgir tras la tala de alrededor de cien árboles ya derribados, según lo comunicado por el Ayuntamiento en un comunicado oficial.

De acuerdo con el mencionado informe del área de Conservación Urbana y Sanidad, el consistorio tomó conocimiento del inicio de estas obras el pasado viernes. Tras verificar la información, se activaron los procedimientos internos para confirmar que los trabajos, inicialmente solicitados por la Universidad de Navarra en octubre de 2022, poseían la autorización adecuada. Sin embargo, la revisión realizada por los departamentos involucrados demostró que el expediente estaba incompleto y que los permisos necesarios jamás fueron gestionados, lo que hizo que la tala fuera considerada ilegal.

En particular, el 30 de junio de este año, el área de Urbanismo solicitó a la Universidad de Navarra una justificación adicional para su solicitud de licencia, exigiendo información técnica y gráfica que respaldara el plan de apeo. Este plan es el que estaba sujeto a aprobación por parte del Ayuntamiento, pero, según se ha argumentado, no se afirmó la existencia de los documentos requeridos, lo que resultó en la falta de autorización municipal para proceder con la eliminación de los árboles.

El personal del Servicio de Jardines se movilizó para inspeccionar la zona afectada, donde constató que cerca de un centenar de árboles ya habían sido talados desde el inicio de los trabajos a principios de mes. Según el Ayuntamiento, durante la inspección se observó que varios de los ejemplares apeados no presentaban signos de podredumbre significativa, lo que pone en tela de juicio la necesidad de su eliminación.

Ante esta situación, la Junta de Gobierno Local decidió aprobar una resolución para interrumpir las obras de manera "inmediata", así como la limpieza de cualquier material o maquinaria que hubiera sido establecido en el lugar, estableciendo un plazo de dos días para su retiro. Además, se ha requerido a la Universidad de Navarra que presente la documentación faltante en un periodo de un mes, advirtiendo que, de no cumplir con estos requerimientos, el Ayuntamiento podría imponer sanciones o exigir la restauración del entorno afectado.

La Universidad de Navarra ahora dispone de un plazo de 15 días para presentar sus alegaciones ante esta resolución, aunque se aclaró que la paralización de los trabajos se mantendrá mientras no se obtenga la licencia correspondiente.

Por otro lado, el Ayuntamiento ha decidido posponer el cierre de tráfico previsto para la calle Universidad, inicialmente programado para este martes. Esta medida se justifica por la necesidad de realizar evaluaciones técnicas complementarias por parte de diversas áreas, entre las que se encuentran Conservación, Urbanismo y Seguridad Ciudadana, especialmente tras el aumento de accidentes en la zona.

Originalmente, se planificó el cierre de la carretera, que abarca el tramo entre las rotondas de la calle Esquíroz y la prolongación de Fuente del Hierro, solo para vehículos de tráfico rodado, estableciendo barreras tipo 'new jersey' y la señalización adecuada. Se previó que solo los vehículos autorizados, como los de emergencia, pudieran transitar por dicha vía, que pasaría a ser designada como Zona de Acceso Controlado (ZAC), con monitoreo a través de cámaras de seguridad instaladas por el propio Ayuntamiento de Pamplona.