En una sesión celebrada el pasado jueves en el Parlamento de Navarra, se aprobó un proyecto de ley foral que autoriza a Sodena a realizar una inversión de dos millones de euros en la empresa Dynamobel de Peralta, además de proporcionar un aval de hasta dos millones de euros. La propuesta, presentada por el Gobierno foral, contó con el respaldo de los partidos PSN, EH Bildu, Geroa Bai y Contigo-Zurekin, mientras que UPN, PPN y Vox optaron por abstenerse.

La justificación de esta ley radica en el "alto impacto socioeconómico de la empresa en la zona de Peralta", donde 185 personas trabajan, lo que hace pertinente una autorización específica de financiamiento.

El consejero de Industria y Transición Ecológica y Digital Empresarial del Gobierno de Navarra, Mikel Irujo, explicó ante el pleno del Parlamento que este proyecto de ley "refleja el compromiso del Gobierno de Navarra con la industria y repercutirá en el desarrollo económico y bienestar de la zona de Peralta".

Irujo señaló que Dynamobel, empresa dedicada al desarrollo, diseño y comercialización de muebles de oficinas y espacios públicos, se vio afectada por un ciberataque en junio de 2023 que provocó una paralización de la producción durante cuatro meses. A pesar de esta dificultad, la compañía logró mejorar su margen bruto en 8 puntos, aunque experimentó una pérdida de facturación de 6 millones de euros.

La concesión del aval estará condicionada al cumplimiento del plan industrial por parte de la empresa antes del 31 de julio.

La parlamentaria de UPN, Ana Elizalde, criticó al Gobierno por "pretender que decidamos en el Parlamento sin haber recibido explicaciones adecuadas". En contraposición, el parlamentario del PSN, Javier Lecumberri, expresó sorpresa por la falta de apoyo de UPN a un proyecto que beneficiaría a una empresa familiar con una fuerte presencia en Peralta.

Desde EH Bildu, Arantxa Izurdiaga recordó la difícil situación de Dynamobel y subrayó la importancia de apoyar el proyecto de ley, mientras que el parlamentario de Geroa Bai, Mikel Asiain, destacó el impacto socioeconómico de la compañía y la necesidad de respaldarla para evitar daños sistémicos.

Por su parte, el PPN se abstuvo debido a las dificultades continuas que enfrenta la empresa en los últimos años, al igual que el partido Contigo-Zurekin, cuyo representante, Miguel Garrido, reconoció la difícil decisión de destinar fondos públicos a una empresa privada.

Vox, representado por Maite Nosti, también optó por la abstención en este asunto.