En un encuentro significativo, la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, se ha reunido recientemente con Beatriz Corredor, la presidenta de Redeia, la empresa matriz de Red Eléctrica. El propósito de la reunión era conocer de cerca los avances de las diversas inversiones que Red Eléctrica está llevando a cabo en la Comunidad foral. Estas inversiones tienen como objetivo principal mejorar el sistema eléctrico de Navarra, garantizar la seguridad del suministro, y estimular la economía local, facilitando el desarrollo industrial y social de la región y fomentando la creación de empleo.

Dentro de las iniciativas contempladas en la Planificación 2021-2026 aprobada por el Gobierno central, se encuentran proyectos clave para impulsar el desarrollo industrial como motor de la economía.

Destaca la construcción de la nueva línea Tierra Estella- Muruarte y la nueva subestación de Tierra Estella, en las cuales Red Eléctrica invertirá la cantidad de 23,7 millones de euros. Estas infraestructuras han sido catalogadas como de interés regional por el Gobierno de Navarra y se espera que su ejecución comience de manera inmediata con miras a su puesta en funcionamiento en 2026.

El Gobierno navarro ha subrayado que estas instalaciones son de vital importancia para garantizar el suministro eléctrico en condiciones óptimas de calidad y seguridad, especialmente para las empresas e instalaciones industriales ubicadas en Tierra Estella, contribuyendo así al crecimiento económico en la zona.

Además, la planificación eléctrica contempla "importantes inversiones" enfocadas en la integración de energía renovable para avanzar en la transición ecológica. Es el caso del eje La Serna-Magallón y Navarra- País Vasco, este último ya cuenta con Declaración de Impacto Ambiental y jugará un rol fundamental en fortalecer el sistema eléctrico, mejorando la calidad y la seguridad del suministro. Esto implicará también mejoras significativas en el entorno, la integración paisajística y la protección del medio ambiente, como el desmantelamiento de 120 km de líneas que atraviesan en parte el parque natural de Aralar.

Por último, se contempla la ampliación de diversas subestaciones con el objetivo de aumentar su capacidad de integración de energía renovable, avanzar en la transición ecológica y cumplir con los objetivos de energía y clima tanto a nivel nacional como europeo.