PAMPLONA, 30 de octubre. El Parlamento de Navarra ha dado un paso importante al aprobar la consideración de una nueva proposición que busca modificar la ley foral sobre el derecho a una vivienda asequible. Esta enmienda llega tras una ley original que fue aprobada en junio y, según sus defensores, introducirá correcciones "técnicas" que facilitarán su eficacia.

La iniciativa legislativa ha sido promovida por los grupos PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin, y ahora pasará a revisión en la comisión parlamentaria, donde los diferentes partidos podrán presentar sus enmiendas antes de que regrese al pleno para su votación final. Mientras que los mencionados grupos han apoyado su avance, UPN, PPN y Vox han manifestado su rechazo, calificando la propuesta como una "chapuza".

El objetivo de la modificación es solventar desajustes técnicos que han complicado la implementación de la ley en sus diversas facetas, especialmente en lo que respecta a los procedimientos de adjudicación de viviendas protegidas. Por ejemplo, se establece que para acceder a una vivienda protegida en alquiler, los demandantes deberán demostrar unos ingresos familiares ponderados que se sitúen entre 5.000 euros y 2,5 veces el Indicador de Suficiencia Adquisitiva por Renta Adecuada (SARA), mientras que para la propiedad se fija un mínimo de ingresos de 19.000 euros.

En relación a la reserva de viviendas protegidas en terrenos municipales, se establece que el Ayuntamiento podrá decidir cuántas viviendas se destinan a personas empadronadas que hayan vivido en el municipio un mínimo de tres años. Además, se especifica que para las familias numerosas con cinco o más hijos, las solicitantes no podrán participar en la selección para obtener las viviendas reservadas para este colectivo, dado que se consideran "incompatibles".

Con respecto a los umbrales de ingresos, se estipula que para las reservas de propiedad y derechos de superficie, el 70% de las viviendas de protección oficial se destinará a los que superen el índice SARA, en un contexto en el que las necesidades habitacionales siguen creciendo.

El parlamentario Daniel López de Contigo-Zurekin defendió la necesidad de estas enmiendas al subrayar que surgen de diálogos con expertos para mejorar las leyes habitacionales. A pesar de su deseo de que toda la cámara apoyara la propuesta, predijo que los partidos de la derecha persistirían en su oposición por consideraciones ideológicas respecto a la regulación del mercado.

Desde UPN, Juan Luis Sánchez de Muniáin expresó su preocupación ante el aumento de personas en espera de vivienda protegida en Navarra, una cifra que ha ido en aumento en los últimos años. Criticó al Gobierno por la insuficiencia de la ley anterior y la necesidad de realizar correcciones a tan corto plazo, sugiriendo que ello refleja una falencia en la calidad legislativa inicial.

En contraposición, Kevin Lucero del PSN defendió que esta modificación no abrirá un nuevo debate sobre el modelo de vivienda, sino que mejorará el vigente, asegurando que cada reforma es un paso necesario para la adecuada implementación de políticas efectivas.

El parlamentario Mikel Zabaleta de EH Bildu expuso su apoyo a la proposición aunque indicó que la firma no era necesaria en esta fase, ya que su grupo buscaría introducir enmiendas relacionadas con el uso de viviendas vacías para abordar el grave problema de la vivienda que afecta a muchos ciudadanos.

Por su parte, Itxaso Soto de Geroa Bai destacó que los cambios incluidos en la propuesta corresponden a solicitudes técnicas y son esenciales para garantizar la aplicación adecuada de la ley original, criticando las reacciones negativas que han surgido debido al "inmovilismo" de algunos sectores.

Finalmente, la parlamentaria Maribel García Malo del PPN reiteró que llevar una nueva propuesta de modificación tan solo tres meses después de la aprobación de la primera es una clara muestra de falta de planificación, y por lo tanto, de calidad en la legislativa. También cuestionó que el verdadero problema de la escasez de vivienda continuase sin resolverse.

Emilio Jiménez de Vox cerró las intervenciones recordando su oposición inicial a la ley foral anterior, sugiriendo que solo se habían tomado acciones superficialmente para ocultar ineficiencias anteriores, y advirtiendo que la situación habitacional no ha cambiado realmente.