Un hombre de 91 años murió trágicamente esta semana luego de atragantarse en un restaurante en Tudela. A pesar de los esfuerzos del equipo médico por realizarle maniobras de reanimación cardiopulmonar, lamentablemente solo pudieron certificar su fallecimiento.

Todo ocurrió alrededor de las 14:25 horas cuando SOS Navarra recibió una llamada de emergencia alertando sobre una persona atragantada en un restaurante. Los agentes de la Policía Local de Tudela se presentaron en el lugar y encontraron a un hombre de 91 años inconsciente en el suelo y a alguien intentando reanimarlo. Los agentes se turnaron para realizar las maniobras hasta que llegó el equipo sanitario, quienes finalmente confirmaron su fallecimiento a las 14:50 horas.

Este lamentable incidente fue uno de los varios sucesos atendidos por la Policía Local durante el martes. A las 15:30, recibieron un aviso de SOS Navarra informando que necesitaban bomberos en una vivienda donde una mujer había caído y no podía levantarse, mientras la cocina permanecía encendida. Los bomberos accedieron al domicilio a través del balcón, ayudaron a la mujer de 80 años a levantarse y la dejaron en compañía de vecinas hasta que llegara una ambulancia para trasladarla al hospital. Según informó la Policía Local de Tudela, al parecer la mujer había subido a una silla para alcanzar algo en los armarios y había terminado cayendo al suelo.

Más tarde, alrededor de las 19:45, se recibió un reporte de una ciudadana que se había caído en las escaleras de acceso a la plaza del mercado. Supuestamente tenía dolor en el tobillo, pero decidió dirigirse por sus propios medios al hospital.

Quince minutos más tarde, se atendió otro incidente en la carretera de Alfaro, donde una mujer de 66 años se cayó después de resbalar en una acera mojada por la lluvia. Poco después, una ambulancia llegó al lugar y trasladó a la paciente al hospital.

Finalmente, alrededor de las 22:20, los agentes recibieron una llamada en la calle Aranaz y Vides informando de una pelea. Al llegar, identificaron a tres hombres que mostraban evidentes signos de embriaguez. Afortunadamente, no se reportaron lesiones y ninguno de ellos quiso presentar una denuncia.