En Pamplona, el 24 de octubre, se ha generado una controversia política en torno a las filtraciones de documentos internos por parte de la Unión del Pueblo Navarro (UPN) que han llevado a tensiones en el Gobierno de Navarra. El partido socialista de la región (PSN) ha expresado su indignación, acusando a UPN de romper la confianza y la ética del diálogo político al difundir un borrador sobre la reorganización de los servicios de urgencias rurales.

Maite Esporrín, portavoz del PSN en materia de Salud, manifestó en una reciente declaración que la acción de UPN es un claro acto de deslealtad, puesto que han utilizado un documento interno como herramienta de oposición en lugar de contribuir a un debate constructivo. Esto surge en respuesta a los comentarios de Leticia San Martín, una parlamentaria de UPN que, en una conferencia de prensa, reveló que el borrador podría implicar el cierre de urgencias en once centros de salud.

Esporrín agregó que el PSN no tenía conocimiento de que UPN tuviera acceso a dicho documento, ya que este formaba parte de un trabajo colaborativo entre el Departamento de Salud y los socios del gobierno, incluidos EH Bildu como socio presupuestario. La portavoz enfatizó que el comportamiento de UPN subraya una falta de responsabilidad y una incapacidad para actuar de manera institucional, ya que en lugar de contribuir a la creación de consensos, optan por el ruido político y la deslealtad.

El PSN argumentó que el borrador en cuestión era simplemente un punto de partida para el debate y no una propuesta finalizada. La intención del documento era explorar diferentes alternativas y posibilidades para mejorar la atención en urgencias rurales. En este contexto, los socialistas han resaltado la necesidad de actualizar la configuración actual de estos servicios, destacando que el trabajo todavía requería una colaboración rigurosa y un diálogo efectivo.

Esporrín reiteró su compromiso hacia una atención sanitaria de calidad, enfatizando la importancia de escuchar a los municipios y buscar un amplio consenso, en lugar de servir a intereses políticos partidistas que comprometan los servicios públicos y la confianza ciudadana.