Crónica Navarra.

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Pamplona establece su primer Plan Municipal de Emergencia para Incendios Forestales.

Pamplona establece su primer Plan Municipal de Emergencia para Incendios Forestales.

PAMPLONA, 5 de diciembre.

El Ayuntamiento de Pamplona ha dado un paso significativo al aprobar por primera vez un Plan Especial de Actuación Municipal ante Emergencias por Incendios Forestales (PAMIF), una herramienta vital en la lucha y gestión de los incendios que pueden asolar zonas forestales. Este plan no solo busca preparar a la ciudad ante un potencial desastre, sino también formalizar y estructurar la respuesta de los recursos públicos y privados de forma coherente y efectiva.

El objetivo de este plan es garantizar una acción rápida, coordinada y eficaz en situaciones de emergencia provocadas por incendios, algo que la Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Pamplona ya ha respaldado. La necesidad de este plan se hace aún más evidente al considerar que Pamplona ha sido categorizada como una Zona de Alto Riesgo (ZAR), particularmente vulnerable durante las épocas de verano e invierno.

Según las autoridades locales, el Plan Especial de Protección Civil de Emergencias por Incendios Forestales de Navarra (INFONA) exige que todas las localidades que caigan bajo la designación de ZAR, así como aquellas en zonas de alta vulnerabilidad, dispongan de un PAMIF, como puso de manifiesto el propio Ayuntamiento en un comunicado. La rápida implementación de este plan es, por ende, una obligación regulatoria que busca proteger a la ciudadanía y el entorno natural de Pamplona.

El camino hacia la aprobación del PAMIF no fue sencillo. Antes de ganar el visto bueno en la Junta de Gobierno, el proyecto fue enviado al Gobierno de Navarra, que también brindó su aprobación. No obstante, tras esta validación inicial, el plan debe regresar al Gobierno de Navarra para su ratificación final, consolidando su estatus como un documento clave para la seguridad local.

El PAMIF está diseñado en ocho secciones principales y cuenta con diez anexos que incluyen planos, fichas de emergencias, procedimientos de mantenimiento y pautas de autoprotección. Incluye una evaluación de la vulnerabilidad de las masas forestales frente al cambio climático y clasifica distintos tipos de combustible presente en la región, además de identificar instalaciones críticas como centros de salud y educativos que necesitan atención especial durante una crisis.»

El análisis de riesgo que acompaña al PAMIF señala tres áreas de exposición que requieren distintas prioridades de intervención para minimizar la amenaza de propagación de incendios. Estas áreas son la interfaz urbano-forestal, la zona urbano-agricola y la agrícola-forestal, todas ubicadas en los márgenes del término municipal. Datos oficiales revelan que, de los 25 km² que conforman la ciudad, un 16% se destina a la agricultura y un 7% a usos forestales, dejando el 77% restante para uso urbano.

El documento también detalla los recursos disponibles para combatir incendios forestales, tanto materiales como humanos, además de la infraestructura municipal que facilitará la extinción de incendios, como importantes vías de comunicación y puntos de abastecimiento de agua. Además, el plan establece polideportivos municipales como puntos de encuentro y atención para la población ante una emergencia, así como un protocolo de evacuación y albergue que se activará en caso de que lo requiera la situación.

Por otra parte, el PAMIF incluye una serie de recomendaciones para reforzar la autoprotección del entorno urbano, sugiriendo la adquisición de equipamiento adecuado para quienes se involucren en labores de prevención y mantenimiento de la vegetación. Se plantea, también, la expansión de la red de hidrantes y su adecuada señalización, así como la implementación de un mantenimiento preventivo antes de que comience la temporada de mayor riesgo. Además, se destacan recomendaciones sobre cómo transformar paulatinamente las especies vegetales en Pamplona, sugiriendo la sustitución de las más inflamables por aquellas que presenten menor riesgo de propagación del incendio.

Por último, el PAMIF incluye herramientas como fichas de autoevaluación del riesgo en la interfaz urbano-forestal, que son fundamentales para identificar inicialmente la vulnerabilidad de las edificaciones ante posibles incendios. Junto a estas, el plan ofrece recomendaciones prácticas para la población antes, durante y después de un incendio forestal, contribuyendo así a la concienciación ciudadana sobre la importancia de la autoprotección. Un registro de mantenimiento y de las acciones realizadas también será parte del plan, asegurando que esté siempre al día y cumpliendo con los objetivos planteados.