Manuel Bermejo y Xabier Celestino exhiben obras inspiradas en sus experiencias personales.

En Pamplona, se inaugura una exposición en la primera planta del Pabellón de Mixtos de la Ciudadela que destaca por unir las obras de los paisajistas navarros Manuel Bermejo y Xabier Celestino. Ambos artistas reflejan en sus pinturas la dualidad entre la vida urbana y el paisaje rural, enriquecidas por sus experiencias personales, mostrando estilos y características que definen su universo creativo individual. A pesar de compartir la temática paisajística y el realismo en su entorno cercano, cada uno utiliza técnicas distintas.

El director de Cultura, Fiestas, Educación y Deporte del Ayuntamiento de Pamplona, Íñigo Gómez, junto a los artistas Manuel Bermejo y Xabier Celestino, han presentado esta exposición que estará abierta al público hasta el domingo 19 de mayo. Bermejo, en la evolución de su pintura, ha logrado innovar al superar el realismo clásico con un lenguaje más depurado y sintetizador. Por otro lado, Celestino ha evolucionado hacia un enfoque más centrado en el paisaje rural y la naturaleza, sin la presencia humana como referente principal.

Tras diez años desde su última exposición individual, Manuel Bermejo regresa a la Ciudadela con pinturas que reflejan paisajes rurales más serenos y abiertos, alejándose de las imágenes urbanas más movidas. Por otro lado, Xabier Celestino, quien expuso en el mismo lugar hace siete años, se ha centrado en mostrar la fuerza del paisaje y de los animales que lo habitan en esta muestra actual.

Las obras de Bermejo presentan paisajes sin la figura humana predominante, destacando la diversidad de situaciones climáticas y la geometría compositiva. Además, se muestran xilografías y pinturas de la floración de árboles en primavera. Por su parte, Celestino destaca por sus contrastes de luz, tonos ocres y paisajes rurales con animales en su hábitat, transmitiendo una sensación de melancolía expresionista en sus obras.

En esta exposición, ambos artistas exploran las estaciones del año, el movimiento de los vehículos y la vida rutinaria de los animales en el paisaje, cada uno con un enfoque y estilo propios que reflejan su evolución artística a lo largo del tiempo.