El vicepresidente segundo, José Mª Aierdi, ha analizado con Ribera la viabilidad técnica de una primera conexión a la altura de Monreal
PAMPLONA, diez Mar.
La vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, mantuvo este viernes un acercamiento en la sede del Ministerio con el vicepresidente segundo del Gobierno de Navarra, José Mª Aierdi, para estudiar el avance de distintos proyectos de transición energética que fomenta la Comunidad foral en colaboración con el Gobierno. Entre ellos, el emprendimiento para contemplar con placas fotovoltaicas el Canal de Navarra -cuya titularidad distribuyen Navarra y el Estado- para producir energía renovable utilizando una infraestructura que existe o la creación de una planta de producción de hidrógeno verde en la Ciudad Agroalimentaria de Tudela (CAT).
En su asamblea con el vicepresidente Aierdi, y tras investigar distintas cuestiones similares con los cambios especialistas precisos o la viabilidad económica del emprendimiento, la ministra Teresa Ribera mostró su respaldo al comienzo de la ejecución de una primera etapa conduzco en el emprendimiento del Canal fotovoltaico bajo el liderazgo público de los dos gobiernos.
Concretamente, el emprendimiento de ingeniería contempla desarrollar un primer tramo de diez km al paso del Canal de Navarra por la Sierra de Alaiz, a la altura de la ciudad de Monreal, punto escogido como el "mucho más perfecto pues da mayores comodidades técnicas de conexión a la red y, en verdad, cuenta ahora con los preceptivos privilegios de ingreso y conexión a la red por la parte de Iberdrola", explicó en un aviso el Gobierno de Navarra.
Esta etapa conduzco prevé una primera inversión de 30 millones de euros al cargo del Gobierno de Navarra y también instalará una capacidad nominal de 20 MWp, precisamente el 12% de la capacidad total calculada para el grupo del emprendimiento, en el caso de realizarse en los 57 km a cielo abierto que cuenta el Canal atravesando la Comunidad de norte a sur. La energía generada en esta primera etapa en la instalación de las placas solares va a poder contemplar el 45% del consumo eléctrico de las edificaciones públicos de la Comunidad foral, "cuyo ahorro y garantía de precio permanente contribuirá, así, a la amortización de la inversión".
La ministra Ribera y el vicepresidente Aierdi han coincidido a lo largo de su acercamiento en la relevancia que consigue para el emprendimiento poder "asegurar el liderazgo público del mismo, tanto en la generación de energía como en su fijación de precio y consumo, independientemente de la licitación para su construcción".
En cuanto al avance técnico, Ribera y Aierdi asimismo han analizado las condiciones primordiales para llevar a cabo coincidente la instalación de las placas fotovoltaicas con el óptimo desempeño primordial del Canal de Navarra, tal como la participación de la sociedad pública mezclada CANASA, formada por los gobiernos español y navarro, y sucesos de la infraestructura hidráulica.
Dentro de su estrategia 'Navarra Green' de ruta transición ecológica, el Gobierno foral está impulsado un emprendimiento para producir electricidad renovable cubriendo de cuadros solares la infraestructura del Canal de Navarra, de forma que "se produzca energía renovable sin que produzca encontronazo medioambiental o territorial ni consumo de suelo, aparte de eludir la pérdida de agua por evaporación en un 30%". En toda la longitud del Canal, se podrían disponer unos 160 MWp, lo que supondría duplicar la producción de energía fotovoltaica de la Comunidad foral.
Entre otros proyectos estudiados, la ministra y el vicepresidente asimismo realizaron un rastreo al avance del emprendimiento 'GreenH2CATudela' de construcción de una planta de hidrógeno verde en las instalaciones del polígono de la Ciudad Agroalimentaria de Tudela (CAT) para abastecer de energía limpia a sus compañías y al grupo de las industrias de la comarca. Con una inversión público-privada cifrada en mucho más de 8 millones de euros, el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), ligado del Ministerio para la Transición Ecológica, termina de aprobar su inclusión en el PERTE ERHA, con una aportación de 2,8 millones de euros de los fondos Next Generation, lo que ha supuesto el espaldarazo definitivo para asegurar la viabilidad del emprendimiento.