Crónica Navarra.

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Hombre sentenciado a prisión por abuso a su pareja en Pamplona.

Hombre sentenciado a prisión por abuso a su pareja en Pamplona.

En Pamplona, la Sección Segunda de la Audiencia de Navarra ha dictado una sentencia condenatoria de 21 meses de prisión para un individuo que abusó de su pareja de manera consistente a lo largo de los cuatro años que duró su relación.

El acusado, un hombre de 42 años de origen ecuatoriano, admitió los hechos y aceptó las penas sugeridas por el fiscal: 21 meses por maltrato habitual, 87 días de trabajos comunitarios en total por dos casos de maltrato esporádico -56 días por un caso y 31 por el otro- y una multa de 3.240 euros por agresión sexual (darle un beso en la boca sin consentimiento).

Por otra parte, la acusación particular había pedido un total de 7 años y 2 meses de prisión. Además, el acusado no podrá acercarse ni comunicarse con la víctima durante 16 años, y deberá compensarla con 6.000 euros.

Según el Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN), el hombre y la denunciante mantuvieron una relación desde principios de 2016. Desde el principio, "con el objetivo de dominarla y someterla a sus deseos, el hombre comenzó a menospreciarla e insultarla". Durante discusiones, "rompía objetos, golpeaba muebles" y la agredía "con empujones y puñetazos".

Además, "la agarraba del cuello, del pelo, la sacudía, rompía su ropa, le destruía el móvil y la amenazaba de muerte si la veía con otro". También le prohibía relacionarse con otras personas y le impedía mantener amistades. En una ocasión, llegó incluso a desnudarla para evitar que saliera a trabajar.

Como resultado de esta violencia, la víctima presenta sentimientos de tristeza, tensión, desesperación y culpa. La sentencia detalla dos episodios de maltrato. El primero tuvo lugar en agosto de 2020, cuando el acusado la empujó contra la pared y la golpeó después de una celebración familiar.

El segundo incidente ocurrió en octubre de 2021 en las afueras de una discoteca, donde el hombre la agarró fuertemente, le dio un beso a la fuerza, la tiró al suelo y la pateó repetidamente. Antes del juicio, el acusado pagó 2.000 euros como compensación, lo que se consideró como una atenuante en la sentencia.