El candidato de UPN, Javier Esparza, se ha mostrado satisfecho con la «victoria sin paliativos» de su partido en las elecciones forales de Navarra, obteniendo 15 escaños. También ha tendido la mano para acordar un Gobierno liderado por la formación regionalista y para que EH Bildu esté fuera de cualquier ecuación política. Esparza ha responsabilizado a la actual presidenta María Chivite de la situación en la que se encuentra EH Bildu en Navarra, culpándola por haberlos «blanqueado, normalizado y dado una relevancia que no tenían».
Además, ha señalado que después de gobernar con el presupuesto más alto de la historia, las formaciones que conforman el Ejecutivo foral -PSN, Geroa Bai y Podemos- han «perdido dos escaños, este es su resultado». Asimismo, asegura que los acuerdos del PSN con EH Bildu «son los máximos responsables de la debacle electoral del PSOE a nivel nacional». Esparza ha emplazado al PSN a que cumpla su palabra y que su candidata a la Alcaldía de Pamplona se vote a sí misma.
Por su parte, Cristina Ibarrola, la candidata regionalista a la Alcaldía de Pamplona, ha destacado que si Elma Saiz (del Partido Socialista de Navarra) cumple su palabra de votarse a sí misma en la conformación del Ayuntamiento, ella será la próxima alcaldesa de la ciudad. Ibarrola ha destacado que «Pamplona ha elegido UPN como primera fuerza para seguir gobernando Pamplona y ha elegido a Cristina Ibarrola como alcaldesa».
Ibarrola ha subrayado que los pamploneses han apostado por un modelo de progreso, libertad y avance, y no por un modelo de retroceso, imposición y sectarismo que representa EH Bildu. Ha considerado una «malísima noticia» que EH Bildu «siga creciendo», pero ha confiado en poder derrotarlos ampliamente en breve.
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