PAMPLONA, 7 de junio. Recientes datos revelan que un 23% de los ciudadanos navarros mayores de 18 años, lo que equivale a alrededor de 130.000 personas, tiene intención de acceder a una vivienda en los próximos años. Esta información proviene de una encuesta realizada por Cíes para la Asociación de Consumidores de Navarra Irache.
Entre este segmento poblacional, los más jóvenes son los que más necesitan una vivienda; de hecho, el 50% de los encuestados menores de 30 años declaró estar en búsqueda activa de un hogar.
Por otro lado, se observa que en localidades de menos de 5.000 habitantes, la necesidad de vivienda es relativamente menor, alcanzando solo al 18% de su población.
En cuanto a los métodos de adquisición, casi la mitad de quienes buscan vivienda (48%) desea adquirir una propiedad, mientras que un 23% opta por el alquiler. Un 17% se plantea comprar una segunda residencia, y el 11% lo ve como una inversión.
A nivel nacional, el precio de la vivienda libre en España experimentó un incremento del 8,4% en 2024, siendo este el mayor aumento desde 2007. Navarra, junto a Andalucía, fue una de las comunidades que registró un aumento notable, con una media del 10,4%.
En lo que respecta a la vivienda protegida, el censo en Navarra muestra 20.800 solicitudes, el doble en comparación con hace cinco años. La Asociación de Consumidores de Navarra Irache alerta que la escasez de viviendas asequibles solo cubre el 8% de la demanda de compra y el 1% del alquiler.
Irache subraya que en un escenario de alta demanda y oferta limitada, los precios solo seguirán escalando. La asociación hace un llamado a la Administración para que intensifique sus esfuerzos y se dé prioridad a la promoción de vivienda, asegurando que esta sea accesible para quienes realmente la necesitan.
La asociación también pide una adaptación de precios a la economía de los consumidores, especialmente para los jóvenes y las familias vulnerables, para que puedan encontrar un hogar mientras se busca mejorar su situación.
Para abordar el problema, urge incrementar la promoción de viviendas protegidas que contengan precios más moderados y, a su vez, fomentar la construcción de viviendas libres que satisfagan la demanda.
Además, se reitera la importancia del alquiler como una alternativa inmediata para aquellos que buscan independizarse, recomendando que este sea asequible para garantizar el acceso, así como la implementación de ayudas para reducir la carga del alquiler, siempre con mecanismos que prevengan abusos.
Irache sugiere evaluar la viabilidad del alquiler con opción a compra, lo cual permitiría a los jóvenes no solo independizarse, sino también invertir en su futuro, acumulando rentas que podrían destinarse a la adquisición del inmueble. Se propone que estas rentas se consideren para un banco público de viviendas, facilitando así un cambio en cómo se percibe el alquiler.
Finalmente, se destaca la importancia de mejorar la rehabilitación de viviendas existentes, buscando optimizar los recursos y mejorar la calidad de vida de los residentes, al mismo tiempo que se aumenta la oferta de viviendas en el mercado.
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