En el día de hoy, el Ayuntamiento de Pamplona y la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona (MCP) han llegado a un acuerdo para implementar un sistema de vigilancia conjunto con el objetivo de controlar y sancionar cualquier incumplimiento de la normativa de residuos, en cumplimiento de un pacto firmado en junio de 2021 que contemplaba, entre otras medidas, la vigilancia conjunta de los incumplimientos en la gestión de residuos.

El alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, y el presidente de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, David Campión, respaldaron esta iniciativa en una reunión llevada a cabo en el Ayuntamiento de Pamplona este lunes.

Ambas entidades han acordado llevar a cabo estos compromisos a través de un nuevo sistema de vigilancia conjunto con capacidad tanto de inspección como de aplicación de sanciones, el cual ha sido implementado en el día de hoy.

El concejal delegado del área de Gobierno Estratégico, Urbanismo, Vivienda y Agenda 2030 del Ayuntamiento de Pamplona, Joxe Abaurrea, señaló que hasta ahora no se había producido una coordinación adecuada entre las dos entidades, y que es fundamental unir esfuerzos para garantizar un correcto funcionamiento. Además, destacó la importancia de colaborar para reducir las malas prácticas en estos ámbitos.

En el acuerdo del año 2021 se mencionaba el abandono de residuos como un problema de incivismo que incide directamente en la gestión de residuos y la salubridad de los barrios, por lo tanto, estas prácticas son consideradas como periódicos y sancionables.

De acuerdo con dicho acuerdo, la Policía Municipal debía hacer cumplir y denunciar posibles violaciones tales como el depósito incorrecto de residuos o incumplir horarios establecidos, mientras que la Mancomunidad debía realizar labores de vigilancia, inspección y control para facilitar las acciones de la Policía Municipal y tramitar los expedientes sancionadores correspondientes.

Ambas entidades se comprometen a poner en marcha estas responsabilidades de manera coordinada a través de patrullas conjuntas que incluirán a un inspector de la MCP y un agente de Policía Municipal.

Tanto Asiron como Campión han estipulado que las medidas punitivas se implementarán en dos fases, sancionando inicialmente a aquellos locales que reincidan en incumplimientos después de advertencias previas, mientras que posteriormente cualquier infracción será sancionada sin excepción.

Se hace hincapié en que el objetivo de estas medidas no es punitivo ni recaudatorio, sino preventivo y de concienciación frente a prácticas incívicas en la gestión de residuos.

Las infracciones incluyen depósitos incorrectos de residuos, sustracción de residuos, daño a contenedores, entre otros, las cuales serán sancionadas según la gravedad de la infracción.

Abaurrea destacó que el enfoque principal es desincentivar estas prácticas incívicas y fomentar el cumplimiento de la normativa, asegurando que confían en que las patrullas conjuntas ayudarán a reducir estas malas prácticas significativamente.

La ordenanza de residuos clasifica las infracciones en tres categorías: leves, graves y muy graves, cada una con multas correspondientes según la gravedad de la infracción.

Es crucial mantener un control riguroso para garantizar la gestión adecuada de residuos y promover prácticas sostenibles en beneficio de la comunidad.