PAMPLONA, 3 Feb.
La presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, ha clausurado este mediodía una día donde se ha anunciado el emprendimiento 'GreenH2CATudela', que contempla la construcción de una planta de hidrógeno verde en las instalaciones de la Ciudad Agroalimentaria de Tudela (CAT) para abastecer de energía a sus compañías y al grupo de industrias de la Ribera.
En el acto, que ha reunido a cerca de cien compañías, Chivite ha subrayado la relevancia del avance de este emprendimiento para la industria de la Ribera, que asimismo "ayuda a la cohesión territorial. Porque el avance de Navarra debe serlo desde una concepción de avance territorial de red social".
Durante su intervención, Chivite ha señalado la "particular relevancia" de este emprendimiento, que se opone a "2 desafíos urgentes" relacionados con la energía: la descarbonización y el poder tener energía a un "precio admisible". "Para una red social como la nuestra, donde la industria tiene un peso fundamental, el hidrógeno verde puede ser una opción alternativa sostenible", ha destacado, según recopila en un aviso el Gobierno foral.
En este sentido, ha señalado que la Comunidad foral tiene "una trayectoria famosa y conocida por su trabajo en el ámbito de las energías renovables" y una Agenda para el Hidrógeno Verde que tiene por propósito "ubicar a la zona como nuevo vector energético del futuro y motor económico para Navarra haciendo un trabajo sobre la base de la colaboración público-privada". "Este PERTE es un caso de muestra de de qué forma ese modelo de colaboración ha de ser un sendero de trabajo para la prosperidad", dijo Chivite.
También se ha dirigido a las compañías navarras que han asistido al acto, remarcando que están "no solo persuadidas y comprometidas, sino más bien apostando fuerte, capitalizando, y a la cabeza en proyectos energéticos y sostenibles".
En la sesión, que tuvo sitio en el Auditorio del Centro de Negocios de la CAT, participaron el presidente de la CAT y vicepresidente y asesor de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos, José Mª Aierdi, y el asesor de Desarrollo Económico y Empresarial, Mikel Irujo. Asimismo, ha asistido el encargado del Gobierno en Navarra, José Luis Arasti.
En su intervención, Aierdi ha señalado la "idea y el impulso inicial del ámbito público" a este emprendimiento. "Los poderes públicos debemos poner en riesgo y adoptar ideas originales para seguir hacia objetivos tan ambiciosos como la soberanía energética, la transformación de nuestro modelo productivo, o la descarbonización de nuestra economía", dijo.
Asimismo, ha complacido la tarea de los equipos especialistas de la CAT y del AIN, quienes "han creído en esta apuesta desde el comienzo y consiguieron construir un emprendimiento resuelva y de idea pública, que ha despertado enormes esperanzas en el ámbito empresarial".
Por su parte, el asesor Irujo ha proclamado que "Navarra da los pasos para fomentar una economía verde y también impulsar la industria del hidrógeno siguiendo la Hoja de Ruta marcada en la Agenda del Hidrógeno Verde, que impulsamos en conjunto con el ámbito privado y aprobamos en 2021. En este corto espacio de tiempo Navarra tiene proyectos que cubren toda la cadena de valor del hidrógeno: generación, consumo y manufactura, con el propósito de lograr la substitución del 5% del consumo de gas natural industrial por hidrógeno verde".
En este sentido, ha señalado que el Gobierno de Navarra "tiene una política fiscal y también instrumentos de asistencia para incitar la transición ecológica de la industria y el apogeo de nuevos campos y novedosas cadenas de valor de economía verde".
La CAT presentó al PERTE de energías renovables el emprendimiento, encriptado en mucho más de 8 millones de euros de inversión, delegados entre los fondos que inyecta nuestra entidad (unos 3 millones), la aportación que ha puesto en compromiso el ámbito privado y los 2,8 millones que proceden de los fondos Next Generation.
Esta inversión expone crear una planta de hidrógeno verde con una capacidad de electrólisis inicial de 3,2 MW en una primera etapa conduzco, ampliable más tarde a diez MW, que está llamada a proveer energía a las compañías de la CAT en un 70%, pero asimismo al grupo de industrias de la Ribera del Ebro con el 30% sobrante.
El hidrógeno verde se empleará como fuente de suministro energético en especial en cadenas de frío - calor en la industria agroalimentaria, pero asimismo en otras plantas industriales.
El parque agroalimentario de Tudela, de la mano y con la asistencia de la Asociación para la Industria Navarra (AIN) y el CENER, inició hace ahora un par de años los estudios preliminares de cara al desarrollo de un ecosistema sobre tecnología de producción de H2 en Navarra y la viable construcción de una planta de hidrógeno verde, en colaboración con múltiples compañías preparadas del ámbito, que supusiese "un salto cualitativo" en los servicios de suministro y distribución de energía sostenible que caracteriza a la CAT. Se prevé que la planta esté en desempeño en el período de tres años.
La Agenda Navarra del Hidrógeno Verde, impulsada por el departamento de Desarrollo Económico y Empresarial, se presentó hace mucho más de un par de años como el marco para establecer esta tecnología en la Comunidad foral, y ubicar a Navarra como nuevo vector energético de futuro.
Para ello, se marca como primordial propósito en el contexto de la Agenda del Hidrógeno Verde la instalación de 150MW de producción de hidrógeno verde para 2030 en Navarra, y la apuesta por que esta fuente de energía reemplazara un 5% del consumo industrial de gas para esa fecha.
El hidrógeno verde "podría ser el comburente sostenible con la capacidad de substituir a los comburentes fósiles en esos campos bien difíciles de descarbonizar", ha destacado el Ejecutivo foral.
El hidrógeno es el elemento químico mucho más abundante del mundo. Es un factor rápido, de manera fácil almacenable, espeso en energía. Existen múltiples métodos de generación de hidrógeno para energía: el gris, logrado de comburentes fósiles; el azul, que viene de comburentes, más allá de que se capture y almacene el CO2 emitido; y, al final, el llamado verde, producido de fuentes renovables, fotovoltaicas o aerogeneradores, y no genera emisiones contaminantes.
El primordial procedimiento de generación de hidrógeno verde es mediante la extracción del átomo de hidrógeno que se encuentra en toda molécula de agua. Suele hacerse con la electrólisis de agua, esto es, la descomposición de las moléculas de oxígeno y la de hidrógeno a través de una corriente eléctrica.
De forma fácil, puede decirse que se conecta corriente eléctrica que viene de una placa del sol o un molino de viento. Los electrodos descomponen el agua de la que se quita el hidrógeno que puede guardarse en baterías con un manejo mucho más simple que las de litio. "A futuro, su empleo puede ser clave en ámbitos que en este momento muestran enorme contrariedad para descarbonizar como la industria química y petroquímica, la siderurgia o el transporte pesado por carretera o mar o la aviación", ha remarcado el Gobierno de Navarra.