El presidente de UAGN, Félix Bariáin, ha pedido un "cambio en la política hidráulica" para permitir el almacenamiento de agua durante épocas de escasez. Esto surge luego de criticar la falta de acción en la gestión de los cauces de los ríos, especialmente ante inundaciones que son cada vez más frecuentes y dañinas para las fincas de los agricultores.
En una visita a Milagro, Baríain expresó su preocupación por la crecida del río Ebro, con impactos en zonas al norte y sur. Se refirió a problemas con el río Arga y otros cauces más pequeños que, pese a no desbordarse, afectan a las propiedades agrícolas.
El presidente de UAGN denunció la situación recurrente de que cada ciertos años los ríos se salgan de su cauce y causen estragos en las fincas, atribuyendo la responsabilidad de esta falta de gestión a diversas entidades sin haber una solución clara a la vista. Además, señaló la actividad de los castores como un factor negativo al talar árboles en los cauces y crear obstrucciones que empeoran las inundaciones.
En cuanto a las consecuencias actuales de las crecidas, Baríain expresó su preocupación por las pérdidas económicas que algunos agricultores sufrirán, resaltando la importancia de un plan nacional de agua para evitar desperdicios y asegurar reservas en tiempos de sequía.
Además, hizo hincapié en la necesidad de limpiar los cauces de forma regular, lamentando la falta de respuesta a las solicitudes de los agricultores para intervenir en la vegetación que obstruye los cauces. Censuró la inacción de las autoridades ambientales con respecto a la actividad de los castores.
En conclusión, plantear un cambio en la política hidráulica y mejorar la gestión de los cauces de los ríos se vuelve cada vez más urgente para evitar pérdidas económicas y daños ambientales causados por las inundaciones recurrentes.
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