En Pamplona, a 20 de noviembre, la Guardia Civil de Navarra ha culminado una exhaustiva investigación llevada a cabo por la Unidad Orgánica de Policía Judicial (UOPJ) que ha destapado un caso de estafa vinculado a un directivo de una empresa. Este individuo es sospechoso de haber conseguido, de manera fraudulenta, equipos tecnológicos valorados en más de 100.000 euros, que posteriormente distribuía a través de plataformas de venta en línea.
La pesquisa se inició tras recibir una denuncia de una empresa que alertaba sobre la adquisición irregular de diversos productos tecnológicos. A partir de un análisis minucioso de la documentación proporcionada, así como de las declaraciones de las plataformas de venta y de las compañías compradoras, y tras realizar una diligencia de entrada y registro, los investigadores lograron identificar un patrón claro de comportamiento delictivo.
Según informes de la Guardia Civil, el modus operandi del sospechoso consistía en solicitar productos a distintos proveedores. Para ocultar la naturaleza fraudulenta de las transacciones, este alteraba los términos de las facturas, ajustándolas a los proyectos de la fundación a la que estaba asociado, lo cual facilitaba los pagos sin levantar sospechas.
Una vez en su poder, los bienes eran ofrecidos a la venta en diversas plataformas online, donde compradores generalmente de buena fe, tanto empresas como particulares, adquirían dichos artículos para su reventa en sus propios comercios.
La investigación sacó a la luz la compra ilícita de numerosos dispositivos tecnológicos, incluyendo 64 teléfonos móviles de alta gama, así como el coste de un programa de postgrado que el investigado realizó y el mantenimiento de sus vehículos personales. Todo ello fue ocultado mediante la manipulación de los conceptos de las facturas para que los pagos fueran asumidos por la empresa.
Durante la operación, se llevó a cabo un registro en el domicilio y trastero del sospechoso, donde se encontraron varios de los productos comprados de manera irregular. Entre estos artículos se hallaron una bicicleta eléctrica, gafas de realidad virtual y una tableta de última generación, entre otros dispositivos.
Además, uno de los teléfonos móviles que fue adquirido de forma ilícita fue identificado como el que utilizaba el investigado, confirmándose esta información a través de los datos proporcionados por las operadoras de telecomunicaciones.
En consecuencia de estos actos, el detenido, un hombre de 45 años de edad y residente en Pamplona, ha sido puesto a disposición del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción Nº1 de Aoiz, donde se le investiga como presunto autor del delito de estafa.
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